Los planetas en la astrología: clasificación y significado
Todos hemos oído hablar o leído en la red sobre la importancia que los planetas tienen en la astrología y, es más, hablar de esto último es hablar del sistema solar incluidos el sol y la luna. No existe una cosa sin la otra dado que el surgimiento de la astrología está dado justamente a través del estudio de los planetas y su movimiento en el espacio. El sol y la luna en este ámbito son conocidos como luminarias y cobran tanta importancia como los planetas en sí mismos al momento de nuestro nacimiento para elaborar la carta natal.
La naturaleza humana se manifiesta a través de ellos y surgen las diferentes dimensiones que esta tiene, lo que a la postre va a derivar en las características que cada persona tendrá en su vida. La clasificación de los planetas se puede realizar desde diferentes ámbitos, hoy la desarrollaremos desde la perspectiva más utilizada, desde el movimiento de los mismos, lento o más rápido, visto desde la orientación de nuestra tierra.
Planetas Personales
Se trata de los planetas que tienen más velocidad de movimiento desde una visión terrestre y a ellos se le atribuyen las características más salientes y destacadas de la personalidad de cada individuo. La astrología nos marca que estos rasgos influyen de manera distinta en cada persona y muestran las diferentes cualidades de ellas destacando las que, de forma más consciente, se pueden controlar de manera más sencilla. Destacan a su vez el potencial que cada individuo presenta y la fuerza que le acompaña para llevar adelante sus metas. Por otro lado, hacen notar las necesidades que esta persona puede tener y la atención que se les debe dar para seguir adelante. Estos planetas son el Sol, la Luna, Marte, Venus y Mercurio.
Planetas Espirituales
Podemos decir que al tratarse de los planetas que se mueven más lentamente estos abarcan el desarrollo de generaciones de individuos más allá de personas y por esta razón se les conoce también como planetas transpersonales. Es preciso destacar que, por ello, acompañan los cambios de manera paulatina, con las energías que transforman las cosas, las ciudades, las sociedades, los colectivos. A partir de hechos intuitivos de las personas como miembros de grupos, estos planetas acompañan e inspiran esta dinámica e impulsan a perfeccionar el coeficiente colectivo por encima del individual y en plazos más largos. En resumen, a partir de la revolución que provocan estos cambios, empujan hacia un desarrollo evolutivo de la humanidad como clan. Los planetas Espirituales son Neptuno, Urano y Plutón.
Planetas Sociales
Finalmente, Saturno y Júpiter caen en el selecto grupo de los planetas denominados Sociales y como tales, se encargan del relacionamiento de las personas con la sociedad donde surgieron a la vida, desde aspectos culturales hasta religiosos. Estos planetas acompañan y motivan socialmente a las personas orientándolos sobre la mejor forma de participar en el entorno que les rodea a través de características de cada uno. Muestran para qué está apto cada individuo y cuál es la mejor forma de integrarse a su propio circulo social.
